Desde la Casa Blanca se transmitió la noche de este miércoles el momento en que Trump habla en el Despacho Oval, donde culpó del estancamiento a los demócratas y muestra la legislación a la prensa. «Hoy enviamos un mensaje claro: jamás cederemos ante la extorsión, porque eso fue lo que ocurrió», según el mandatario.
El paquete legislativo incluye tres proyectos de ley de asignaciones que proporcionan fondos para la construcción militar, los asuntos de veteranos, el Departamento de Agricultura y el poder legislativo hasta el 30 de septiembre del próximo año y mantiene al resto del gobierno en funcionamiento en los niveles actuales hasta el 30 de enero de 2026.
Como era de esperar, la mayoría de los demócratas de la Cámara Baja se opusieron a la iniciativa legislativa, porque no aborda la expiración de los créditos fiscales para la atención médica, que eran el punto central de las exigencias del partido para el cierre del gobierno. El proyecto de ley pasó este miércoles en su primera votación en el pleno (222 a 209).
La medida que avaló el Senado el jueves (60 votos a favor y 40 en contra) solo promete un sufragio a mediados de diciembre, pero no da garantías de que se convertirá en ley. Por lo tanto, esta podría ser la próxima batalla en el Capitolio. Ocho demócratas se unieron a 52 republicanos para alcanzar el umbral de 60 votos y enviar de nuevo el proyecto de ley a la Cámara de Representantes.
El proyecto de ley de financiación (ahora convertido en ley) no incluyó ninguna prórroga de los subsidios de la Ley de Cuidado de la Salud Asequible (Affordable Care Act, más conocida como Obamacare) que expiran en enero y que provocarán sensibles incrementos en las primas de los seguros médicos.
La traba durante semanas fue, precisamente, la exigencia de los demócratas de que solo apoyarían un acuerdo de financiación que incluyera prórrogas para esos subsidios.
Trump admitió que el cierre o shutdown fue negativo para los republicanos en las elecciones a las gobernaciones de Virginia y Nueva Jersey, donde los demócratas lograron la semana anterior convincentes victorias.
La Casa Blanca despidió además en la etapa de cierre a miles de empleados públicos, redujo la capacidad de vuelos en los principales aeropuertos, sobrecargando a los controladores aéreos, e impugnó la orden judicial de pagar a los beneficiarios del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP).
Los efectos del cierre “tardarán semanas, probablemente meses, en calcularse con precisión”, expresó Trump, quien cree que el cierre beneficiará a los republicanos en las elecciones de medio término (midterms) del venidero año.
El actual cierre superó al de diciembre de 2018- enero de 2019, que fue de 35 días. En ese caso en el primer mandato de Trump (2017-2021).
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