El profesor Luis de León, coordinador de la Cátedra extracurricular José Martí, lo recordó como uno de los estrategas militares más notables de las Antillas, cuya disciplina, firmeza y visión lo convirtieron en un referente del liderazgo patriótico.

Destacó el papel determinante del banilejo en la lucha por la independencia de Cuba, donde su talento táctico y su compromiso con la libertad marcaron momentos decisivos de la Guerra de los Diez Años (1868-1878) y la Guerra Necesaria (1895-1898).

Subrayó que el legado de Gómez trasciende fronteras y continúa como símbolo de unidad, sacrificio y vocación libertaria en el Caribe.

Se refirió, además, a la importancia de estudiar a profundidad en la República Dominicana la trayectoria de Gómez para comprender el alcance de su pensamiento.

En un aparte con Prensa Latina, De León señaló que conocer su legado permite valorar la influencia que ejerció en la configuración de los ideales independentistas del Caribe, en tanto resaltó sus vínculos con el Héroe Nacional de Cuba, José Martí.

Asimismo, remarcó la necesidad de que los pueblos de América Latina y el Caribe se apropien de su historia, identifiquen a sus próceres y fortalezcan su conciencia colectiva.

Solo desde ese conocimiento —afirmó— es posible defender con firmeza la identidad, la soberanía y los valores que unen a la región, expresó a este medio de prensa.

En el acto, De León reiteró la propuesta de que cada 18 de noviembre, fecha del natalicio de Máximo Gómez, sea reconocido oficialmente como el “Día del Internacionalismo Dominicano”.

Al respecto, argumentó que ese día debe servir para destacar la fraternidad entre los pueblos latinoamericanos y caribeños, inspirada en la vida y acción de Gómez por la independencia de Cuba.

Por su parte, Gerardo Roa, decano de la Facultad de Humanidades de la UASD, resaltó los valores de Gómez, a quien definió como uno de los grandes héroes de Hispanoamérica, un “valiente banilejo dominicano y cubano”.

Afirmó que la República Dominicana, Cuba y Puerto Rico comparten la lengua de José Martí, de Gómez y de Pedro Henríquez Ureña (uno de los intelectuales dominicanos más influyentes de América Latina), así como una identidad caribeña que une a estos pueblos en la defensa de la libertad.

Mientras, el embajador de Cuba en la República Dominicana, Ángel Arzuaga, destacó: “Qué suerte para Cuba haber contado con Gómez en sus luchas; qué fortuna que la única revolución hecha por el pueblo cubano, iniciada el 10 de octubre de 1868 y triunfante el 1 de enero de 1959, tuviera entre sus más ilustres combatientes a un banilejo, a un dominicano”.

Resaltó también los vínculos del líder cubano Fidel Castro con la República Dominicana como presidente del comité Pro-Democracia Dominicana, y su posterior participación en 1947 en la expedición armada de Cayo Confites con el objetivo de derrocar al tirano Rafael Leónidas Trujillo, junto a otros jóvenes de América Latina.

Agradeció el gesto de la UASD de entregar el título Doctor Honoris Causa a Fidel Castro en una de sus visitas a este país, y apuntó que el revolucionario dedicó su vida a luchar por la paz, la independencia y sobre todo por la defensa de la soberanía.

También valoró a la UASD, a la vicerrectora de extensión de esa academia, la doctora Rosalía Sosa, al profesor Luis de León, estudiantes y representantes de organizaciones políticas, por este homenaje a Gómez, un hombre que nació en Baní, que es dominicano, pero también cubano, manifestó.

El diplomático felicitó a los alumnos dominicanos, en especial a los de la UASD, en ocasión de celebrarse este 17 de noviembre el Día Internacional de los Estudiantes, y congratuló al centro de altos estudios, que cada 28 de octubre celebra su fundación en 1538 como la primera universidad de América.

Al acto asistieron Manuel Salazar, presidente del Partido Comunista del Trabajo, y representantes de otras organizaciones políticas.

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