Durante la 30 Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP30), la secretaria de Medio Ambiente, Alicia Bárcena, destacó que la NDC 3.0 eleva la ambición climática del país mediante el incremento de las metas de reducción de emisiones.

También a través de la incorporación de un componente de pérdidas y daños como eje central y el fortalecimiento del marco de adaptación.

Al intervenir en el segmento de alto nivel, la titular catalogó a la COP30 como un punto de inflexión para la acción climática global.

“En esta COP de la verdad, lo que llamamos pérdidas y daños no son cifras: son niñas, niños y familias que lo pierden todo en cuestión de minutos”, subrayó la funcionaria al remarcar la urgencia de atender a las poblaciones más vulnerables ante un clima cada vez más extremo.

Bárcena instó a que el compromiso internacional se traduzca en hechos y dijo que se precisa “financiamiento climático real y accesible; cooperación y transferencia tecnológica, no imposiciones; corresponsabilidad, no simulaciones”.

La actualización de la NDC considera metas absolutas de mitigación sin precedentes, que sitúan las emisiones de México entre 364 y 404 millones de toneladas de CO₂ equivalente para 2035 en la modalidad no condicionada, y entre 332 y 363 millones de toneladas en la condicionada.

También contempla la hoja de ruta hacia una transición energética y social justa, alineada con el Plan México, que impulsa la economía circular, la conservación del 30 por ciento del territorio para 2030, la restauración de ecosistemas estratégicos y soluciones basadas en la naturaleza.

La titular destacó que esta visión surge de un proceso colectivo, pues se forjó escuchando a comunidades, juventudes, mujeres y otros sectores, y reafirmó el compromiso de México con los derechos humanos, la igualdad y el Acuerdo de Escazú.

“Los derechos no se presumen, se garantizan; los acuerdos se cumplen”, afirmó al exhortar a la comunidad internacional a convertir a Belém en un punto de inflexión mediante la aceleración de la acción climática global bajo el principio de responsabilidades compartidas pero diferenciadas.

Un comunicado de la Secretaría fechado aquí refiere que Bárcena también participó en eventos como el diálogo “El Club del Clima como acelerador de la transición industrial”, donde se abordaron políticas y mecanismos de financiamiento para descarbonizar sectores productivos.

Posteriormente, México, Guatemala y Belice presentaron la Iniciativa del Corredor Biocultural de la Gran Selva Maya, destinada a fortalecer la gobernanza ambiental trinacional y la conservación de esa área.

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