Lo único que hicieron fue seguir el mandato de la asamblea de los pueblos y enaltecer la defensa del voto y la decisión electoral de las y los chapines en las urnas durante las votaciones de 2023, detallaron los firmantes en un comunicado.

Rechazaron además los cargos, aseguraron que las protestas fueron pacíficas y demandaron que se respete la autonomía de los pueblos indígenas.

Expresaron asimismo que la medida de prisión preventiva decretada en contra de Pacheco y Chaclán es “arbitraria e innecesaria”.

“Ha pasado largo tiempo de una innecesaria privación de libertad”, consideraron, mientras afirmaron que “las familias y los pueblos les extrañan en sus hogares”.

Las acusaciones del Ministerio Público (MP) en este caso “carecen de fundamento”, ampliaron, y resaltaron que manifestarse no es un delito.

“Se equipara la defensa de la democracia con terrorismo, lo cual sienta un peligroso precedente para la sociedad guatemalteca”, advirtieron.

La Fiscalía contra el Crimen Organizado detuvo a Pacheco y Chaclán el 23 de abril pasado, los ligó a proceso los delitos de terrorismo y obstaculización a la acción penal y luego les añadió el de asociación ilícita.

Diversas organizaciones denunciaron aquí el retraso de las audiencias contra los exlíderes indígenas y manifestaron respeto y reconocimiento a ambos.

Repudiaron la persecución arbitraria del MP, encabezado por Consuelo Porras, en contra de quienes protestaron pacíficamente por los abusos de poder, la corrupción y la impunidad.

Pacheco lideró a los indígenas de Totonicapán, que emergieron durante octubre de 2023 con bloqueos en vías de la nación y mantuvieron por más de 100 días consecutivos una protesta frente al MP.

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