El programa prevé el monitoreo epidemiológico permanente, la vigilancia genómica, la comunicación de riesgo para viajeros y el inicio anticipado de la campaña de vacunación de invierno en 2026.

También contempla la disponibilidad de antivirales y guías clínicas actualizadas y el uso obligatorio de mascarillas en servicios de urgencia a partir del año próximo.

Aunque en Chile no se ha detectado ningún caso de la influenza H3N2 variante K, el contagio de dos niños en el vecino Perú levantó las alarmas.

El H3N2 provoca síntomas similares a los de la gripe estacional común, como fiebre, dolores corporales, fatiga extrema, tos, náuseas y vómitos, pero puede ocasionar complicaciones en adultos mayores y personas con factores de riesgo.

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