Fue la punta del iceberg de la jornada, cuando España sigue en pleno disfrute de las fiestas, ahora con los preparativos de las celebraciones por fin de año.

Sin embargo, la portavoz del Ejecutivo y ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saíz, afirmó este jueves que Feijóo «debería dimitir porque lleva un año mintiendo», respecto a los mensajes que intercambió con el expresidente de la Generalitat valenciana Carlos Mazón.

Se refería así a la situación durante las primeras horas de la Depresión Alta de Niveles Aislados (DANA), que causó la muerte a más de 220 personas en la provincia de Valencia en octubre de 2024.

«El señor Feijóo lleva un año mintiendo, así es que ya solamente por eso debería dimitir»,señaló Saíz tras referirse en entrevista con RTVE a que el líder del PP está citado como testigo por una jueza que investiga lo ocurrido durante la DANA por las autoridades.

Anteriormente, el político conservador dijo en repetidas ocasiones que estuvo en todo momento al tanto de lo que ocurría en Valencia en tiempo real informado por Mazón, lo cual ahora parece no exacto.

En esta misma línea, el Ministerio de Defensa solicitó a Feijóo y a Mazón que pidan disculpas públicas por «faltar a la verdad» sobre el despliegue de la Unidad Militar de Emergencias (UME) en la DANA.

«Los mensajes intercambiados (entre Feijóo y Mazón) (…) demuestran que la UME estuvo a disposición desde el minuto uno, como reconoce el propio Mazón en sus mensajes de WhatsApp», dijo en un comunicado la cartera de Defensa.

Los textos del 29 de octubre de 2024, remitidos por Mazón a Feijóo y conocidos ahora (entre las 20:08 y las 23:29 hora local), admiten el desastre y las actuaciones, entre otros organismos, como la UME.

De momento no hubo reacciones directas del PP, pero en el enfrentamiento constante con los socialistas y especialmente contra el Gobierno de Pedro Sánchez, una de sus fuentes cargaron sobre el dispositivo baliza V16.

Se trata de un aditamento de uso obligatorio de la Dirección General de Tráfico (DGT), que entra en vigor desde el 1 de enero de 2026 y sustituye a los triángulos de carretera.

Su alto costo, en el orden de los 40 euros, fue criticado por el PP al señalar que servirá para engrosar aún más las arcas del Ejecutivo, que recaudarán en el orden de los 300 millones de euros en el año vía IVA.

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