Un estudio de la Confederación General Italiana de Industrias (Confindustria), publicado este sábado en el sitio digital del diario Avvenire, apunta que la IA se está incorporando cada vez más a los procesos productivos y organizativos empresariales, aunque aclara que la capacidad para aprovechar al máximo su potencial es limitada.
En ese proceso de transformación tecnológica, presente en particular en las grandes empresas, 11,5 por ciento de esas entidades ya utiliza o prueba soluciones basadas en algoritmos avanzados, mientras que asciende a 37,6 puntos el porcentaje de aquellas que consideran su introducción, indica el análisis.
Entre las aplicaciones más extendidas se encuentran el análisis de datos, el marketing, la investigación y desarrollo, así como la automatización y la atención al cliente, áreas donde la IA está ayudando a redefinir las metodologías operativas, las estrategias empresariales y la organización del trabajo, precisa el texto.
En 43,7 por ciento de las empresas que ya comenzaron a adoptar la IA, se implementaron procesos internos para gestionar el impacto en los recursos humanos, en particular mediante programas de formación interna, consultoría especializada o la contratación de nuevos profesionales, confirma la Confindustria.
Riccardo Di Stefano, directivo de esa confederación, señaló al darse a conocer los resultados de esta investigación que “las empresas italianas están en el corazón de la transformación digital, y la Inteligencia Artificial pronto se convertirá en un factor competitivo decisivo”.
El documento expone que, aunque muchas empresas están avanzando rápidamente en el ámbito tecnológico, una parte considerable de las mismas se encuentran rezagadas en la actualización de competencias, así como en los planes de formación.
La falta de competencias internas es el principal problema crítico, presente en el 36,7 por ciento de las compañías, seguida de la complejidad de integrar los procesos existentes y los elevados costes persistentes.
También se enfrentan problemas motivados por el desajuste entre la oferta y la demanda de competencias, que sigue siendo un desafío, ya que el 67,8 por ciento de las empresas declaran tener dificultades para encontrar profesionales adecuados, un problema estructural, en un contexto con rápidos cambios provocados por las nuevas tecnologías.
Finalmente, los analistas de la Confindustria refieren que, en Italia, el teletrabajo se encuentra actualmente en una fase de estabilización, pues ya fue adoptado por el 32,3 por ciento de las empresas, agrega la fuente.
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