Se trata de un derramamiento de sangre sin precedentes, dijo Volker Türk en un comunicado de prensa luego de que cuatro palestinos fueran asesinados el lunes y otros dos jóvenes de 16 y 18 años fueran baleados por las Fuerzas de Defensa de Israel.
Como si los trágicos acontecimientos ocurridos en Israel y luego en Gaza durante los últimos ocho meses no fueran suficientes, el pueblo de la Cisjordania ocupada también está sometido día tras día a un derramamiento de sangre sin precedentes, lamentó.
«Es impensable que se hayan quitado tantas vidas de manera tan desenfrenada», afirmó.
Türk consideró inaceptables las matanzas, la destrucción y las violaciones generalizadas de los derechos humanos.
«Israel no sólo debe adoptar sino hacer cumplir reglas de enfrentamiento que estén plenamente en consonancia con las normas y estándares de derechos humanos aplicables”, agregó.
A su juicio, cualquier denuncia de homicidio ilegítimo debe ser investigada exhaustiva e independientemente y los responsables deben rendir cuentas.
De acuerdo con la Oficina del alto comisionado, las Fuerzas de Defensa mataron a casi 200 palestinos en Cisjordania ocupada desde principios de 2024, en comparación con 113 y 50 en los mismos períodos en 2023 y 2022 respectivamente.
Aunque las hostilidades entre Hamas e Israel no alcanzan esa zona, los militares israelíes llevaron a cabo al menos 29 operaciones con ataques aéreos, vehículos aéreos no tripulados, aviones y misiles tierra-tierra contra campos de refugiados y otras zonas densamente pobladas.
Como consecuencia, 164 palestinos murieron, entre ellos 35 niños.
La Oficina advirtió de una prevalencia de víctimas palestinas con disparos en la parte superior del cuerpo y a las que se les negó asistencia médica.
Esto sugiere una intención de matar en violación del derecho a la vida, en lugar de una aplicación gradual de la fuerza y un intento de reducir situaciones tensas en los casos en los que los disparos claramente no representaban una amenaza inminente a la vida, agregó el texto.
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