Por el momento, el intercambio comercial entre Rusia y Bolivia es bajo, reconoció el primer mandatario ruso, no obstante lo consideró de tener buenas tendencias en ámbitos estratégicos como las altas tecnologías.

Putin recordó que la corporación estatal rusa de energía atómica Rosatom construye el Centro de Investigación y Desarrollo en Tecnología Nuclear en la ciudad boliviana de El Alto.

Por su parte, el líder boliviano precisó además que los dos países tienen en marcha un proyecto de producción de baterías de litio .

Arce agradeció a su par del gigante euroasiático por el apoyo en la realización de varios programas conjuntos, en aras de apoyar el desarrollo de las naciones.

En vísperas del encuentro, el presidente boliviano calificó la reunión con “el hermano presidente, Vladimir Putin”, de “importante” y agregó que su viaje a Rusia tiene como objetivo fortalecer las “relaciones bilaterales en lo económico, comercial, energético y otros”.

El jefe del Estado boliviano recibió una invitación de Putin para participar de manera especial en la XXVII edición del Foro Económico Internacional (Spief 2024), uno de los eventos empresariales más grandes del mundo que arrancó el 5 de junio en San Petersburgo, la capital rusa de la cultura.

La agenda oficial de trabajo del visitante incluye para un encuentro con estudiantes de la Universidad Estatal de San Petersburgo, institución que lo investirá con el título de Doctor Honoris Causa.

Previamente, se reunió con el director general de Rosatom, Alexei Likhachev, luego de depositar una ofrenda floral en el Cementerio Memorial de Piskarovskoye, en cuyos túmulos yacen los restos de cerca de un millón de personas fallecidas durante la resistencia y la ruptura del bloqueo de las tropas nazifascistas contra la entonces denominada Leningrado (1941-1944).

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