Con esta proyección el próximo día 23 esa sede diplomática rinde homenaje al aniversario 65 de la fundación del Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos en 1959.
Acercar a cubanos residentes y costarricenses a la extensa filmografía cubana con películas de todos los géneros es el objetivo del ciclo de exhibiciones, que arrancó en enero último con la cinta José Martí, el ojo del canario, del realizador Fernando Pérez, en ocasión del aniversario 171 del natalicio del Héroe Nacional de Cuba.
Memorias del subdesarrollo tiene como protagonistas al fallecido actor Sergio Corrieri (1938-2008) y a Deisy Granados, Premio Nacional de Cine 2007.
Según su sinopsis, el filme tiene como personaje central a Sergio, un pequeño burgués diletante que decide quedarse en el país cuando la familia se marcha hacia Estados Unidos.
Imaginativos recursos expresivos, perfecto guion y logradas caracterizaciones hacen de este filme una obra maestra, emblemática del cine cubano, resalta la crítica.
A juicio de Titón en aquellos momentos de su estreno, la película es una buena ocasión para señalar algunos aspectos de la realidad de nuestro país que pueden ayudar en la mejor comprensión del filme que van a ver.
Al cabo de casi 10 años de Revolución hemos aprendido que nuestra condición de país subdesarrollado (explotado durante 400 años, primero por España y después por Estados Unidos) no se supera sino a costa de mucho trabajo y muchos sacrificios, dijo.
No ha sido fácil llegar a esta conclusión, pues durante los primeros años la alegría del triunfo nos hizo creer que el paraíso estaba al alcance de la mano, subrayó el también realizador de La muerte de un burócrata (1966) y Fresa y chocolate (1993).
Galardonada con varios galardones desde su estreno, algunos de ellos en festivales en la antigua Checoslovaquia, Memorias del subdesarrollo mereció, además, el Premio Rosenthal, de la Asociación Nacional de Críticos Cinematográficos de Estados Unidos, Nueva York 1973.
A estos se suman el Premio Charles Chaplin, de la Agrupación de Jóvenes Críticos, Nueva York 1973, y en el Festival de Cine Semana Cultural Alcances Cádiz, España 1975.
Fue escogida como la mejor película de Cine Iberoamericano, según la encuesta convocada por el portal de información cinematográfica noticine.com. en 2009.
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