En un artículo para la plataforma Resumen Latinoamericano, el también sociólogo resaltó la vigencia del pensamiento del Comandante en Jefe, a 98 años de su nacimiento, y aseguró que es una figura histórica universal.

Su biografía se emparenta con la de los grandes héroes de la humanidad. (…) Era de este mundo, pero volaba mucho más alto, veía más lejos y penetraba en lo más profundo del universo. Dueño de una inteligencia excepcional y de una memoria fotográfica, sus conocimientos atravesaban los más diversos campos, afirmó.

Además, aseguró que el reconocido estadista “era tan sabio como valiente, condiciones que rara vez coinciden en una sola persona, pero se armonizaron en su humanidad”.

En 1992 anticipó el colapso climático que hoy pone en jaque la sobrevivencia del planeta. Cada día concita más admiración, no sólo por sus virtudes intelectuales, sino también porque su lucidez siempre iba de la mano de su solidaridad militante, añadió Borón.

Por otra parte, aseveró que nadie puede quejarse de que Fidel Castro no lo acompañó en su batalla.

Ernesto Guevara y Nelson Mandela son dos de los testimonios más conocidos. Yaser Arafat y la revolución argelina también lo son, como los niños de Chernobyl, expuestos a las radiaciones de la central nuclear que fueron dejados a su suerte, expuso el politólogo.

Ahí estuvo Fidel para recibirlos, cuidarlos y curarlos. Por eso se le recuerda hoy, se extraña y necesita. Su legado es un tesoro que debemos cuidar y a la vez socializar, concluyó.

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