En el Centro para la interpretación de las relaciones culturales Cuba-Europa tuvo lugar la presentación de esta producción audiovisual de unos 12 minutos, a cargo de un equipo liderado por el realizador Eddy Michel, que describe el camino recorrido por la valiosa escritora y periodista cubana en defensa de los derechos de las mujeres en las letras y la acción política.
Mariblanca Sabas Alomá (1901-1983) ejerció el periodismo en diversas publicaciones, estuvo entre los fundadores del Grupo Minorista en 1927, organización progresista, resultó delegada a los dos primeros congresos nacionales de mujeres (1923, 1925) y fue la primera de ellas en un gabinete ministerial.
Tras el triunfo de la Revolución cubana en 1959, ya jubilada, participó activamente en las transformaciones sociales y políticas, en la prensa escrita y radial, y dirigió programas de televisión sobre temas sociales.
Durante la presentación, la periodista, editora, profesora y doctora en Ciencias de la Comunicación María Grant resaltó que Sabas Alomá perteneció a una generación de intelectuales que en los años de 1920 defendieron la cubanía, el rescate de la verdadera historia de las guerras de independencia y la difusión de la obra de José Martí.
La admiro por su feminismo, por su patriotismo, por su irreverencia, es una contemporánea nuestra, enfatizó. A ese sentido de contemporaneidad se refirió el ensayista, profesor y doctor en Ciencias Históricas Julio César González Pagés, al destacar que Sabas Alomá resume la historia de las mujeres y el feminismo en Cuba.
González Pagés -quien fue entrevistado para el documental y participó en su presentación-, señaló en declaraciones exclusivas a Prensa Latina que ella trascendió todas las épocas y no solamente por sus acciones sino por el discurso; “no hubo que renovarlo porque ya lo estaba”.
“Las luchas iniciadas por Mariblanca Sabas Alomá en los años de 1920 continúan con nuevos retos y lo estamos viendo en la actualidad, con el enfrentamiento al patriarcado que hoy se hace más visible, aparece más en la prensa”, subrayó.
Expuso que ella desde sus inicios hizo una prensa diferente. “Rompió con el esquema de mujeres en las publicaciones tratando temas de belleza, de modas, que tenían que ver con vanidades. Y convirtió el discurso del feminismo en un discurso político. Así que yo creo que ese epíteto de campeona del feminismo cubano lo sigue teniendo en el siglo XXI”.
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