En un comunicado, la organización denunció que, en un contexto marcado por innumerables ataques y un criminal bloqueo impuesto por más de seis décadas, el gobierno estadounidense, por medio de su embajada en La Habana, y grupos terroristas en el sur de la Florida, intentaron promover por las redes sociales un estallido social en la isla.
Esta hipócrita y burda puesta en escena tiene como principal objetivo justificar una mayor ofensiva del imperialismo contra la Revolución cubana y, sobre todo, intentar impedir lo que durante décadas la comunidad internacional condena y exige a Estados Unidos: el cese inmediato del cerco económico, comercial y financiero, señala el texto.
Asimismo, indica que Washington “estigmatiza, descalifica y vuelca todo su odio contra Cuba, violando el principio de igualdad soberana de los Estados y de autodeterminación de los pueblos”.
El documento apunta que mientras la gestión del presidente Joe Biden acusa al país caribeño de violar los derechos humanos, “Estados Unidos organiza acciones militares en todo el mundo e intentos de invasión, magnicidio y golpe de Estado en Venezuela; construye conflictos armados contra Rusia; instala bases militares y estimula la narco-política y el paramilitarismo en Colombia y Ecuador; y ocupa territorio, roba petróleo, ganado y cosechas, organiza y financia grupos terroristas en Siria”.
Los ataques cometidos contra la embajada de Cuba en Washington y la feroz campaña para desacreditar la colaboración médica de esa nación son solo algunas de las muestras del permanente accionar hipócrita del imperialismo, afirma.
Desde el triunfo de la Revolución, el hermano pueblo cubano resiste heroicamente los ataques de sectores reaccionarios y conservadores del mundo, con Estados unidos a la cabeza. La violación de su soberanía, el bloqueo, la difamación mediática internacional, los sabotajes y el terrorismo, son parte de los constantes ataques a Cuba, añade.
Los Descamisados manifestaron su respaldo a la mayor de las Antillas y resaltaron su ejemplo como nación libre, rebelde y solidaria.
A quienes intentan torcer la voluntad del pueblo de José Martí (1853-1895) y Fidel Castro (1926-2016), desde cada rincón del mundo les decimos “fracasaron y seguirán fracasando”. Jamás podrán doblegar a la Revolución ni a su pueblo, concluye.
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