En el Gran Palacio del Pueblo, el gobernante asiático subrayó que esta decisión está en consonancia con la corriente histórica y las tendencias globales.
Xi enfatizó que la amistad no conoce fronteras y que, mientras haya apertura, el futuro será prometedor.
Asimismo, destacó el inicio de un nuevo capítulo en la historia de las relaciones entre China y Nauru, al tiempo que expresó la disposición de fortalecer los lazos bilaterales en beneficio de ambos pueblos.
El mandatario subrayó la política de igualdad de trato de Beijing hacia todas las naciones, independientemente de su tamaño o influencia.
Xi Jinping afirmó que la relación bilateral se basa en el respeto mutuo, la igualdad y el apoyo recíproco.
«China respalda firmemente a Nauru en la protección de su soberanía nacional, seguridad e intereses de desarrollo, y está dispuesta a fortalecer los intercambios y diálogos en todos los niveles y campos para consolidar la base política de las relaciones bilaterales», agregó.
Por su parte, Adeang expresó gratitud por la cálida acogida y ponderó la decisión de Nauru de adherirse al principio de una sola China y reanudar las relaciones diplomáticas con Beijing.
Asimismo, manifestó el compromiso de aprovechar esta nueva etapa para fortalecer el entendimiento entre ambos y desarrollar una asociación fructífera y mutuamente beneficiosa.
Los mandatarios firmaron documentos de cooperación bilateral sobre la construcción conjunta de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, la implementación de la Iniciativa de Desarrollo Global, así como en áreas de colaboración vinculadas al desarrollo económico y agrícola.
En enero pasado, Nauru se convirtió en el último país en romper nexos diplomáticos con Taiwán y reconocer el principio de una sola China, el cual subraya que todo el territorio nacional, incluida esa isla, es parte del gigante asiático con Beijing como gobierno central.
Actualmente 183 naciones aceptan que Taiwán forma parte de China, mientras que una docena mantienen las relaciones con Taipei.
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