El director del organismo dijo en rueda de prensa después de una reunión de la junta ampliada de la Fiscalía General del país, que lo anterior se demuestra con lo que sucede en las regiones de Bélgorod, Briansk, Kursk, así como en otras partes del país.
Bórtnikov recordó que las fuerzas rusas previnieron varios atentados «organizados por los servicios de inteligencia militar y el Servicio de Seguridad de Ucrania».
«Por nuestra parte hacemos, por supuesto, todo lo posible, pero nuestras posibilidades no son ilimitadas», admitió Bórtnikov, refiriéndose al reciente ataque terrorista en Crocus City Hall.
El atentado tenía como objetivo desestabilizar la situación en Rusia, sembrar pánico en la sociedad, enfatizó el alto cargo.
En opinión de Bórtnikov los servicios de inteligencia ucranianos están directamente implicados en el ataque terrorista a la sala de conciertos y, en ese contexto, el jefe del FSB destacó la necesidad de reconocer el Servicio de Seguridad de Ucrania como organización terrorista.
Al mismo tiempo, afirmó que el autor intelectual del atentado todavía no ha sido identificado, sin embargo, señaló que los terroristas intentaron huir a Ucrania y que allí les esperaban para «recibirlos como héroes».
Bórtnikov acusó también a los servicios especiales occidentales de facilitar la preparación del reciente sangriento ataque por parte de islamistas radicales «para aumentar las tensiones”.
ro/gfa
