El embajador y director del instituto cultural que lleva el nombre de Porras, sede del foro, llamó derrotero de la diplomacia e historia del Perú, a una línea que propugna hasta la actualidad “promover todo lo que acerque a los pueblos y abominar todo lo que los aparte”.
Citó así una frase del alegato de Porras contra la condena a Cuba que le costó el cargo y el ostracismo que su quebrada salud no pudo resistir, pues falleció unas semanas después.
El llamado Canciller de la Dignidad de Perú mantuvo esa posición en la VII reunión de la Organización de Estados Americanos de San José de Costa Rica, en la cual defendió la soberanía y la autodeterminación del pueblo cubano frente a la injerencia extranjera.
Tras reseñar el contexto histórico de la independencia de las naciones latinoamericanas, Mendívil señaló que en el inicio de la lucha cubana por su emancipación, Perú tuvo un activo papel y fue el primer país que reconoció a la república de Cuba en Armas.
Recordó que esa gesta fue apoyada por los héroes peruanos Leoncio y Grocio Prado y un grupo de patriotas cubanos que tomaron un barco de la armada española e izaron en él la bandera de la República de Cuba en Armas, nave que destruyeron y abandonaron al verse cercados por el enemigo.
El diplomático apuntó que Porras estuvo muy al tanto de aquella historia, pues su abuelo, Antonio Barrenechea, canciller de entonces, tuvo una directa participación como representante de una diplomacia inspirada en ideales de justicia y en la afirmación del derecho contra la fuerza, apuntó.
Por su parte, el historiador Antonio Zapata elogió además las dotes de Porras como maestro universitario e historiador y describió el contexto histórico de las luchas por la independencia del siglo XIX, dentro de estas la de Cuba y el respaldo peruano.
Consideró que las relaciones peruano-cubanas han tenido diversos momentos y mencionó el afecto entre ambos pueblos y las coincidencias en favor del multilateralismo y contra las guerras.
La exministra de la Mujer y exembajadora de Perú, Aida García Naranjo, resaltó el rechazo peruano contra el bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos contra Cuba, el cual llamó a condenar por su carácter ilegal e inhumano.
Elogió la solidaridad de Cuba para con Perú tras el letal terremoto de 1970, cuando la isla aportó a la zona afectada seis hospitales y envió médicos para socorrer a los damnificados de terremotos, inundaciones y otras emergencias.
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