El flujo esta previsto y la Dirección de Migración y Extranjería (DGME) espera atender a más de 500 mil viajeros a través de las diferentes fronteras del país, tal como evidenciaron recientes reuniones entre funcionarios locales con sus pares de Guatemala para garantizar la seguridad de vacacionistas durante la etapa.
La institución precisó que este registro corresponde a viajeros atendidos en los puntos migratorios vía aérea, terrestre y marítima.
La atención a 500 mil personas, según el director general de Migración y Extranjería, Ricardo Cucalón, representaría un incremento de un 11 por ciento con respecto a los datos de 2023.
En relación al tema, las autoridades plantean que para enfrentar la llegada de visitantes, el país debe empeñar un gran esfuerzo en el desarrollo de más infraestructuras hoteleras, pues las existentes no dan abasto.
Este «boom» turístico sobrepasó la capacidad de alojamiento de los hoteles existentes en el país, en especial en las zonas consideradas de alto potencial turístico, como Surf City y la capital, San Salvador.
La ministra de Turismo, Morena Valdez, llamó al empresariado local y a inversionistas extranjeros a invertir en la llamada industria sin humo que debe crecer en cerca de 33 mil habitaciones en esta década para responder a la demanda.
«Ya posicionamos a El Salvador como un país seguro para visitar, ahora viene todo este ordenamiento que hay que hacer en el territorio con los empresarios», detalló la titular en una reciente entrevista televisiva.
Valdez precisó que a corto plazo el país requiere una cifra estimada de seis mil habitaciones.
«La gran afluencia de visitantes que recibe El Salvador debe satisfacerse con una mayor oferta turística. El Salvador está siendo líder en crecimiento turístico en la región centroamericana, ahora el reto es hacer sostenible ese crecimiento”, dijo.
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