Por segunda vez en 24 horas, los uniformados irrumpieron esta madrugada en la norteña ciudad de Tulkarem y su suburbio de Shweika, precisó la agencia oficial de noticias Wafa.
Allí detuvieron a ocho ciudadanos, incluido un padre y sus dos hijos, tras allanar viviendas, subrayó la fuente.
Los militares se desplegaron en el centro de la urbe y en barrios cercanos, donde causaron daños a la estructura.
Casi de forma simultánea, las tropas israelíes asaltaron la aldea de Al-Nassariya, en el valle central del Jordán, y también el poblado de Jayyus, en la región septentrional de la Ribera Occidental.
Jayyus fue cercada por los efectivos castrenses, quienes levantaron retenes para controlar la entrada y salida de sus habitantes, denunció Wafa.
Las fuerzas de ocupación sitiaron la localidad, donde establecieron puestos de control, cerraron algunas calles con barreras de tierra y detuvieron vehículos con el pretexto de buscar al autor del atentado a tiros contra un autobús de colonos hace dos días, destacó.
Los militares también arrestaron a tres jóvenes palestinos en el campamento de refugiados de Aqabat Jarb, cercano a la sureña ciudad de Hebrón.
Desde el comienzo del nuevo ciclo de violencia, el 7 de octubre último, Israel arrestó a más de ocho mil personas en Cisjordania.
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