Biden recibió a Kishida este miércoles con todos los honores en la Casa Blanca, como una muestra de la importancia que da a este aliado en la región del Indopacífico.
Los acuerdos en esta primera visita oficial de un líder japonés en nueve años, suponen el retoque mayor a la alianza militar bilateral en 65 años. Se incluyen convenios en materia de defensa y tecnología.
Por ejemplo, uno de los anuncios de más connotación es la reestructuración del mando militar del Pentágono en Japón, que muestra un notable aumento en su gasto en el gobierno de Kishida.
Para Biden, quien estuvo al lado de Kishida en una conferencia de prensa conjunta, esta es «la mejora más significativa de nuestra alianza desde su establecimiento».
También se refirió a la creación por parte de Estados Unidos, Japón y Australia de una red conjunta de defensa aérea, aunque no ofreció más detalles.
Biden y Kishida dieron a conocer igualmente otras propuestas bilaterales en ciberseguridad, inteligencia artificial, microchips y exploración espacial.
Durante un encuentro la víspera en el Centro de Prensa Extranjera, Mira Rapp-Hooper, directora senior para Asia Oriental y Oceanía en el Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, explicó la importancia de las alianzas en una región prioritaria para la política exterior de Estados Unidos.
La reunión Biden-Kishida antecedió a la celebración en esta capital de una cumbre trilateral mañana en la que participarán los dos líderes y el mandatario filipino, Ferdinand Marcos Jr.
Un cita que, según no pocos conservadores, tendrá puesto los ojos sobre China.
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