Bajo el título de “Carta Solar Europea”, el compromiso fue suscrito por representantes de 21 gobiernos; la Comisión Europea en la figura de la comisaria de energía, Kadri Simson, y por directivos de importantes compañías del sector.
Entre las grandes empresas que apoyaron la iniciativa figuran EIT Innoenergy, European Solar Manufacturing Council, Solar Power Europe, Amarenco, Belga Solar, Carbon Solar, Enel, Engie, IBC Solar, MCPV, SMA y Solarwatt.
Según refiere el texto, China es el principal proveedor para cubrir buena parte de la demanda de módulos solares en la UE, lo cual genera riesgos a corto plazo y largo plazos para los intereses económicos del área comunitaria.
El acceso a módulos solares asequibles procedentes de diversas fuentes, así como una cadena de valor solar europea resistente, sostenible y competitiva son necesarios para lograr una tasa de despliegue en línea con objetivos como el de alcanzar al menos un 42,5 por ciento de energías renovables para 2030, considera el pronunciamiento.
Sin embargo, la industria fotovoltaica de la UE pierde competitividad por su alta dependencia de importaciones de materias primas y la reducción de los precios de los paneles importados.
De acuerdo con el documento, la situación resulta insostenible y pone en peligro las inversiones en nuevas plantas de fabricación; de hecho, algunas empresas anunciaron recortes en sus operaciones y la intención de reubicar negocios fuera de la UE, en particular, en Estados Unidos.
Las partes llamaron a considerar la posibilidad de utilizar todas las oportunidades de financiación de la UE disponibles, así como las flexibilidades previstas en el Marco Temporal de Crisis y Transición de ayudas estatales para apoyar nuevas inversiones en la cadena de suministro de energía solar.
Por la Comisión Europea, reiteraron el compromiso de facilitar el acceso a la financiación comunitaria para proyectos de fabricación de energía solar fotovoltaica, mediante el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, fondos estructurales o fondos destinados a la investigación.
“Se necesitan más acciones urgentes a corto plazo para afrontar la crisis en la industria manufacturera europea”, resume la Carta Solar.
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