Beijing destacó los consensos alcanzados con Alemania en diversos ámbitos tras la recién finalizada visita oficial del canciller federal, Olaf Scholz.
El presidente Xi Jinping subrayó la profunda interconexión de las cadenas industriales y de suministro entre su país y Alemania, así como la alta interdependencia de estos mercados.
El gobernante señaló el vasto potencial que existe para la colaboración en sectores tradicionales como maquinaria y automóviles, así como en áreas emergentes como la transición verde, la digitalización y la inteligencia artificial.
Ambas partes establecieron el mecanismo de diálogo y cooperación China-Alemania sobre el cambio climático y la transición verde y acordaron la creación de un grupo de trabajo sobre reducción de carbono.
Sobre otro tema, esta semana el canciller chino, Wang Yi, y su homólogo iraní, Hossein Amir Abdollahian, conversaron sobre la respuesta de Teherán contra Israel y la disposición a no escalar el conflicto.
Durante el diálogo telefónico, el jefe diplomático chino dijo que Beijing tomó nota de las declaraciones del país persa en las que describió sus acciones como limitadas y de autodefensa.
China condenó enérgicamente el ataque a la embajada iraní en Siria, expresó su confianza en Teherán y su capacidad para manejar la situación de manera adecuada, proteger su soberanía y dignidad, y evitar una mayor escalada.
Beijing repudió esta semana el despliegue de misiles de capacidad de alcance medio (MRC) por parte de Estados Unidos en la isla de Luzón, Filipinas.
El portavoz de la Cancillería Lin Jian denunció que la decisión busca una ventaja militar unilateral en Asia-Pacífico e instó a Washington a detener cualquier acción que socave la estabilidad en la zona.
Esta semana fue noticia que China creció un 5,3 por ciento en el primer trimestre del año, una expansión respecto al 5,2 por ciento que registró en el último período de 2023.
Según la Oficina Nacional de Estadísticas, debe tenerse en cuenta que «la complejidad, severidad y la incertidumbre del entorno externo están aumentando, y la base para la estabilidad y mejora económicas aún no es sólida».
China se convirtió esta semana en el primer país del mundo en traducir a su idioma la actual Constitución de Cuba, «una poderosa prueba de la amistad especial» entre ambas naciones.
Así lo aseguró Zhu Jianhua, director de la Editorial de la Fiscalía Suprema Popular, a cargo de la publicación de la Carta Magna.
En declaraciones a Prensa Latina, uno de los principales artífices del proyecto, Pan Deng (Pablo), dijo que esta Constitución «es un documento que marca un hito en la historia de la revolución socialista cubana, en la historia de la elaboración de constituciones en el mundo y en la historia del movimiento comunista mundial».
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