Según el portal Poder360, a partir de este lunes, las universidades federales de Sao Paulo, Bahía y Mato Grosso do Sul se adherirán a la paralización.
En total, 30 instituciones federales de Educación Superior mantienen la inacción. Son 23 universidades, seis institutos y un centro tecnológico.
Tras la asamblea celebrada el 26 de abril, el Sindicato Nacional de Docentes de las Instituciones de Enseñanza Superior (Andes) y otros dos declararon que no aceptarán lo propuesto por el Gobierno.
La administración del presidente Luiz Inácio Lula da Silva intentó negociar con los profesionales un reajuste salarial del nueve por ciento en enero de 2025 y otro del 3,5 en mayo de 2026.
Tales ofertas «han sido ampliamente rechazadas porque no hay ninguna perspectiva de que estemos en el presupuesto de 2024», afirmó el presidente de Andes, Gustavo Seferian.
Precisó que las propuestas para los próximos años «están muy por debajo de las expectativas que la categoría pleitea, que es de 22,71 por ciento en la recomposición de nuestras pérdidas remunerativas».
El sindicato subraya la necesidad de revertir medidas de austeridad que impactó severamente al sector educativo en los últimos años, destacando las restricciones de derechos previsionales y la inhibición del ejercicio de huelga.
Seferian enfatiza en la urgencia de una reestructuración en la carrera de los profesores y la derogación de medidas taxativas implementadas anteriormente.
Frente a las movilizaciones, el Ministerio de Educación admite estar empeñado en negociar, buscando alternativas que valoricen los funcionarios del sector y atiendan las demandas presentadas.
En nota, la cartera destacó que «viene haciendo todos los esfuerzos para buscar alternativas de valorización de los servidores de la Educación, atento al diálogo franco y respetuoso con las categorías». También aludió al reajuste concedido por el Gobierno federal a los funcionarios públicos en 2023.
Además de evidenciar las lagunas en la estructura y financiación de la educación superior y técnica, la huelga plantea cuestiones importantes sobre el futuro de la enseñanza en Brasil.
Las asociaciones sindicales solicitaron asimismo una reunión de emergencia con los ministerios de Planificación y Presupuesto, Hacienda y Educación. Pretenden presentar una contrapropuesta antes del 3 de mayo.
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