El subsecretario general de Asuntos Humanitarios, Martin Griffiths, llamó a proteger especialmente a los civiles en esa región que ya luchan por sobrevivir.
La urbe, asediada por las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), es la única zona de Darfur no controlada en su totalidad por los rivales del ejército sudanés y alberga a cientos de miles de desplazados internos, incluidos supervivientes de ataques anteriores.
El Programa Mundial de Alimentos aseguró este lunes que la creciente violencia impone cada vez mayores restricciones a la ayuda humanitaria en la zona.
El mes pasado, esa agencia de la ONU llevó alimentos a más de 300 mil personas en Sudán, incluidas 40 mil habitantes de El Fasher, donde los desplazados internos representan cerca de la mitad de la población.
Sin emabrgo, los reportes de un inminente ataque de las RSF encienden las alarmas ante el riesgo de un deterioro mayor del contexto para los civiles.
El embajador adjunto de Reino Unido ante la ONU, James Kariuki, dijo a la prensa que el Consejo de Seguridad está preocupado por la crisis humanitaria que podría desencadenarse con la escalada.
Entre otros temas, el órgano advirtió este lunes por la magnitud del riesgo de hambruna, el desplazamiento de personas y las trabas impuestas por ambos lados del conflicto a la ayuda humanitaria.
«Se está gestando una crisis de proporciones épicas», dijo por su parte la representante permanente de Estados Unidos, Linda Thomas-Greenfield.
Tras las consultas a puertas cerradas, celebradas por el órgano de seguridad, los miembros pidieron a las RSF detener el asedio y la acumulación de fuerzas militares, así como la adopción de medidas urgentes por todas las partes para reducir la escalada.
Igualmente, instaron a todos los países, en particular aquellos con influencia en la región, a pronunciarse por el respeto al derecho internacional, la protección de civiles y detener el flujo de armas hacia los bandos en conflicto.
Todas las partes deben permitir un acceso humanitario completo, rápido, seguro y sin obstáculos, incluido el acceso transfronterizo, urgieron además.
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