De acuerdo con la Defensa Civil, los bomberos trabajaron para extinguir el incendio del automóvil y recuperar los cuerpos de las víctimas.
En las redes sociales, usuarios compartieron un video que mostró el incendio del automóvil impactado por aviones israelíes.
Antes del mediodía, el bombardeo de artillería de las fuerzas de Tel Aviv alcanzó las afueras de las aldeas de Naqoura, Kafr Hammam y Rashaya al-Fakhar, en el sur libanés.
En este contexto, la Resistencia de Líbano (Hizbulah) anunció el fallecimiento de Ali Ahmad Hamza y Ahmed Hassan Maatouq, a quienes declaró mártires en el camino de la liberación de Jerusalén (Al Quds).
Ayer, los ataques israelíes apuntaron a las localidades de Aitaroun, Aita al-Shaab, Jabal al-Bout, Ramia, Tel al-Nahhas en los alrededores de Kafr Kila, al-Odeisseh, Blida, las alturas de Rihan, el distrito de Tuffah, así como Yaroun y Marjayoun.
En respuesta, Hizbulah llevó a cabo 12 operaciones militares que incluyeron el bombardeo con misiles a edificios utilizados por soldados del ejército israelí en los asentamientos de Metula, Shlomi, Al-Manara, Hanita y Avivim.
Como parte de sus acciones en respaldo a Gaza, los combatientes de la Resistencia confirmaron el ataque contra efectivos enemigos mientras entraban a los búnkeres en los sitios de Al-Malkiya y Al-Raheb.
Los proyectiles de artillería de Hizbulah impactaron una concentración de uniformados mientras se movían en las cercanías de la posición de Ramya y con drones de asalto destruyeron los equipos de vigilancia recién instalados en el emplazamiento de Al-Assi.
En otro ataque, la Resistencia golpeó con cohetes el punto de Al-Samaqa en las colinas libanesas ocupadas de Kfar Shuba y un misil de gran calibre Burkan (Volcán) impacto el cuartel general de mando de la Brigada 91 en Branit.
Hizbulah anunció la ejecución de una acción aérea con aviones no tripulados suicidas hacia el recién establecido cuartel general de mando de la Brigada Occidental en Ya’ara.
En este contexto, el Canal 14 israelí comentó que la Resistencia libanesa destruye edificios y causa importantes daños a los asentamientos en el norte; mientras, el gobierno de Tel Aviv pierde gradualmente su fuerza ante los logros de Hizbulah.
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