En un comunicado leído ante la prensa, el titular se refirió a la información divulgada este lunes sobre un pequeño grupo de países que sancionan a Venezuela.

«Rechazo de manera categórica las pretensiones de la UE de coaccionarme, al igual que al Poder Electoral, y de tratar de aparentar, ante la opinión pública internacional, que proceden al levantamiento de las medidas coercitivas unilaterales impuestas», indicó.

Afirmó que el anuncio efectuado hoy por la UE, en el que se dan a conocer el levantamiento de sanciones “a mi persona, no las acepto por ser inmorales y contraria a mis valores ciudadanos”.

Esa decisión del bloque comunitario europeo de levantar las sanciones solo a mí, dijo, es contraria al deber que como venezolano tengo, de honrar y defender la patria, sus símbolos y valores, resguardar y proteger la soberanía, la nacionalidad, la integridad territorial, la autodeterminación y los intereses de la nación.

Amoroso consideró “indigno y desleal aceptar esta dádiva” de la Unión Europea solo para él y dejar a los 30 millones de venezolanos afectados por las sanciones y bloqueos impuestos por la UE y otro pequeño grupo de países “enemigos de nuestra nación”.

El titular del CNE demandó el cese integral e incondicional de las medidas coercitivas unilaterales del bloque comunitario, así como de cualquier otro mecanismo de chantaje que interfiera en el desarrollo libre y soberano del proceso político nacional.

La UE persiste en sus “prácticas neocoloniales sin aplicar ninguna corrección a su errado intervencionismo contra Venezuela”, afirmó.

Apuntó que con una torpe maniobra busca eludir el creciente rechazo internacional a las aplicaciones de esas medidas extorsivas que lesionan los derechos humanos de los pueblos.

El presidente del Poder Electoral expresó que la comunidad internacional conoce del incalculable daño patrimonial que esas sanciones ocasionaron al pueblo, con la consiguiente afectación a sus derechos humanos.

Amoroso exhortó a la UE y demás países, Estados Unidos y el Reino Unido, a proceder al levantamiento de la totalidad de “las sanciones coercitivas unilaterales genocidas impuestas al digno pueblo venezolano” y al cese de la persecución contra los empresarios que, junto al Estado, garantizan las medicinas y alimentos.

Lo correcto, enfatizó, es levantar la totalidad de las sanciones al pueblo venezolano.

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