En una entrevista ofrecida al diario local La Hora, Abad advirtió que desde el Tribunal Contencioso Electoral (TCE) se prepara un proceso en su contra, para removerla del cargo.
Según Abad, el pasado viernes recibió un correo electrónico en el que la Secretaría de la Presidencia le pedía a la Cancillería el informe sobre sus actividades en Tel Aviv.
«Piden un informe para saber si estoy o no cumpliendo la paz aquí en Israel. Seguramente no voy a pasar el examen porque no he podido declarar la paz», dijo la funcionaria.
Abad responsabilizó al presidente de la República, Daniel Noboa, por el “hostigamiento y abuso” de poder del que ha sido víctima ella y que se ha observado en el proceso judicial en contra de su hijo, Francisco Barreiro, acusado por supuesto tráfico de influencias.
El mayor de los hijos de Abad salió de la cárcel de máxima seguridad, La Roca, en la ciudad de Guayaquil, la pasada semana tras recibir autorización para responder en libertad al caso luego del pago de una fianza de 20 mil dólares.
Barreiro enfrentará la justicia en libertad, pero con medidas como la prohibición de salida del país y la presentación todos los días miércoles ante la autoridad judicial.
La vicepresidenta ecuatoriana insinuó que la detención de su hijo se debe a un plan para que no ocupe la Presidencia de la República cuando Noboa tenga que entregársela para hacer campaña electoral si aspira al cargo en las elecciones de febrero de 2025.
El pasado 8 de diciembre, Abad viajó a Israel para desempeñarse como embajadora extraordinaria y plenipotenciaria en Tel Aviv y colaboradora para la paz, según la orden de Noboa, nombramiento que cuestionó la funcionaria y diversas organizaciones políticas y de derechos humanos.
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