Pese a los repetidos llamamientos por parte de jefes de Estado, funcionarios de la ONU y ONG humanitarias para que se abstuviera de expandir su ofensiva terrestre a Rafah, las tropas israelíes entraron en la zona el 7 de mayo, denunciaron esas agrupaciones en un comunicado conjunto.
Recordaron que antes del inicio de la operación castrense, esa urbe acogía a más de un millón de refugiados, la mayoría mujeres y menores de edad.
Si bien el Ejército ya ocupó zonas urbanas dentro de Rafah, la emisión de nuevas órdenes de evacuación conducirá al colapso total de los servicios de salvamento, alertaron.
Al respecto, señalaron que “la ofensiva militar israelí interrumpió el acceso de la ayuda a Gaza a través de los cruces (fronterizos) de Rafah y Kerem Shalom”.
Llevamos meses advirtiendo que se debe impedir la entrada de Israel en esa localidad o Gaza se enfrentaría a una catástrofe humanitaria aún mayor, recalcaron.
La inacción de terceros países se considera una falta de preocupación por las consecuencias para la exhausta población civil, es inaceptable y se deben adoptar medidas inmediatas para evitar más sufrimiento, afirmaron.
En especial, señalaron que Estados Unidos tiene una responsabilidad importante por las violaciones de los derechos humanos por parte del Gobierno de Benjamin Netanyahu, “como principal proveedor de armas para el esfuerzo militar de Israel”.
Las ONG aseguraron que las órdenes de evacuación de las Fuerzas Armadas de esa nación son ilegales y equivalen a un traslado forzoso, una grave violación del derecho internacional humanitario.
“Cada hora durante la cual las fuerzas israelíes ocupan los cruces de Rafah y Kerem Shalom condena a más palestinos al hambre y a la denegación de atención médica”, apuntaron.
La declaración está firmada entre otros por ActionAid, Acción contra el Hambre, Oxfam, Anera y la Red Internacional Médicos del Mundo.
kmg/rob
