El movimiento libanés confirmó los ataques con armas adecuadas contra edificios utilizados por efectivos del ejército enemigo en las referidas colonias, en represalia por el bombardeo israelí a los trabajadores de la compañía eléctrica en la ciudad de Maroun Al-Ras.
Como parte de las operaciones en respaldo a la Franja de Gaza, Hizbulah logró un impacto directo con cohetes en la acción dirigida al sitio de Al-Samaqa en las colinas libanesas ocupadas de Kfar Shuba.
Los combatientes de la Resistencia golpearon con misiles y proyectiles de artillería las posiciones de Al-Baghdadi, Jal Al-Allam, Al-Sadh y la colina Al-Tahyat.
Durante la fecha, los hombres de Hizbulah ejecutaron con precisión un ataque aéreo con drones de asalto contra las posiciones de artillería del recién creado 403 Batallón, al sur de Beit Hillel, así como las ubicaciones de sus oficiales y soldados.
A través de comunicados separados, la Resistencia libanesa anunció la muerte de los combatientes Mohammad Ali Bou Ta’am y Ali Hasan Sultan, a quienes declaró mártires en el camino de la liberación de Al-Quds (Jerusalén).
En este contexto, los medios de comunicación israelíes informaron del lanzamiento de cohetes desde el sur del Líbano hacia la región de Alta Galilea, sin la activación de las sirenas de alarma.
Por su parte, el Canal 12 en hebreo reflejó incendios en edificios en Kfar Giladi y Avivim después de la caída de un misil antitanque lanzado desde Líbano.
De acuerdo con el periódico Israel Hayom, Hizbulah logró realizar el sueño árabe de desarraigar a los israelíes de sus hogares y crear refugiados en la propia entidad, cuyo número alcanza los 100 mil desplazados.
En la jornada, los bombardeos israelíes tuvieron como objetivos las aldeas de Aita al-Shaab, Mays al-Jabal, Maroun Al-Ras, Kafr Kila y Hula, en el sur libanés.
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