El proyecto denominado Empleos para la Vida ofrecerá 30 por ciento de un salario mínimo a los empleadores por cada joven de 18 a 28 años que contraten y será financiado con el Presupuesto General de la Nación.
De forma adicional, los contratantes podrán recibir un 10 por ciento más, si alguno de los beneficiarios permaneció desempleado los últimos cuatro meses.
El programa, que exige a los empleadores mantener vinculados a estos trabajadores un mínimo seis meses, busca además fomentar el empleo formal.
Los contratantes pueden ser personas naturales, jurídicas, uniones temporales y aquellos con patrimonios autónomos que puedan demostrar su calidad de empleador.
Adicionalmente, estos podrán recibir el aporte estatal de 35 por ciento de un salario mínimo legal vigente por incluir en su nómina a personas con discapacidad, 20 por ciento por dar un puesto a mujeres mayores de 28 años, y 15 por ciento por hombres mayores de 28 años.
En el caso de poblaciones de jóvenes, mujeres y hombres mayores de 28 años y personas con discapacidad, se incluye también a las personas afrodescendientes, negras, raizales, palenqueras, indígenas, el pueblo Rrom (gitanos), campesinas y de la comunidad de lesbianas, gays, bisexuales, trans, travesti, intersexual y queer.
El programa realizará la primera convocatoria a empresas interesadas el venidero mes de junio.
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