“Las soluciones en la que estamos trabajando: primero, explorar para producir crudo nacional, petróleo; segundo, industrializar, plantas de biodiésel, dos plantas con tecnología FAME (ésteres metílicos de ácidos grasos) y una HVO (aceite vegetal hidrotratado)”.
Indicó que de esa forma se tratará de revertir la situación actual y tener un 80 por ciento de producción boliviana y 20 puntos porcentuales importado y que este 20 por ciento sea eficiente.
Según Dorgathen, “el 2021 ingresamos con la exploración de Boquerón que estaba paralizado desde el 2017 que no fue desarrollado por el no pago de incentivos a la producción de petróleo”, explicó.
Añadió que comenzaron con la producción en Yarará, el descubrimiento en Yope y la puesta en desarrollo de Boquerón, con lo cual lograron revertir la curva de producción de petróleo.
Según Dorgathen, en 2006 el país comenzó a importar combustibles en un 20 por ciento, para ese momento se tuvo que tomar una decisión de contar con una logística armada y no se hizo.
Bolivia cuenta con una planta de importación en Arica (Chile) que opera YPFB, el resto son alquiladas, según un reporte institucional.
Añade que en 2014 el país pasó del 20 por ciento a las 50 unidades porcentuales, dato que perfilaba a Bolivia como un país importador.
Tres años después la cifra de importación de diésel creció hasta el 60 por ciento, a pesar de la aprobación de la Ley de Incentivos, instrumento legal que no cumplió con su objetivo, situación que se traduce en la caída abrupta de la producción de petróleo, explicó Dorgathen.
El presidente Luis Arce inauguró el 26 de marzo en el departamento de Santa Cruz la primera Planta de Biodiésel de Bolivia y de esa forma inició la reducción gradual de las importaciones de diésel y gasolina.
Arce anunció en el discurso inaugural un incentivo al incremento de cosechas de materia prima para esta nueva factoría de biocombustibles.
Bolivia «empieza a producir su propio biocombustible a partir de la materia prima que producen nuestros hermanos del agro y eso es importante, porque abandonamos poco a poco esa dependencia (de la importación)”, enfatizó el jefe de Estado.
El dignatario calificó el 26 de marzo de fecha histórica, pues con la fabricación de biodiesel el país altiplánico inició la era de la industrialización de biocombustibles, una promesa de su campaña electoral, cuando se postuló en 2020.
Una fábrica similar será inaugurada en noviembre próximo en Senkata, municipio de El Alto, departamento de La Paz, según se informó, y una tercera de HVO está prevista para su edificación en territorio cruceño.
jf/jpm
