En represalia al ataque israelí en las cercanías del hospital Mártir Salah Ghandour en Bint Jbeil, el movimiento libanés lanzó decenas de misiles pesados contra las colonias fronterizas de Kiryat Shmona, Meron, Safsufa y Zivon.
Tras observar a un grupo de soldados enemigos entrando a un edificio en el asentamiento de Metula, los combatientes de Hizbulah lo atacaron con las armas apropiadas, dejando víctimas confirmadas en su interior, en repulsa por el bombardeo a la aldea libanesa de Aitaroun.
La Resistencia respondió a la agresión israelí contra la plaza de la ciudad de Houla y ejecutó una operación aérea con drones de asalto dirigida al cuartel general del Batallón Sahel de la 769 Brigada en Beit Hillel y los emplazamientos de las plataformas de la Cúpula de Hierro.
En su declaración, Hizbulah anunció el golpe preciso en el ataque contra las tripulaciones, oficiales y soldados en sus ubicaciones.
A través de declaraciones separadas, la Resistencia detalló el impacto directo en las acciones dirigidas al cuartel Zebdine y el sitio Al-Samaqa, en los territorios ocupados libaneses de las granjas de Shebaa y las colinas de Kfar Shuba, respectivamente.
Durante la fecha, las armas de los francotiradores de Hizbulah destruyeron el equipo de espionaje recién desplegado en el sitio Misgaf Am y al amanecer golpearon con misiles guiados y proyectiles de artillería la guarnición y las posiciones de efectivos en la posición de Malikiyah.
Antes del mediodía, el fuego de la Resistencia atacó una fuerza israelí durante la entrada de sus vehículos al lugar de Malikiyah después de vigilar y observar la entrada del referido emplazamiento.
También, los hombres de Hizbulah lograron impactos directos en una operación contra un edificio utilizado por uniformados enemigos en el asentamiento Margaliot.
Este lunes, las Brigadas Al-Quds, ala militar del movimiento Yihad Islámico palestino, informaron la muerte del combatiente Mohammed Mahmoud Suleiman, quien cayó en el sur de Líbano como parte de la Batalla Diluvio de Al-Aqsa.
Los medios israelíes reflejaron la activación de las sirenas en los asentamientos de Kiryat Shmona, Kfar Giladi, Tel Hai y Misgav Am, así como decenas de explosiones en Meron y sus alrededores tras una andanada de unos 50 cohetes lanzados desde el sur de Líbano.
En este contexto, el jefe del asentamiento Margaliot, Eitan Davidi, anunció la decisión de romper los lazos con el gobierno de Benjamín Netanyahu y retirar a todos los soldados de la localidad.
La Autoridad de Radiodifusión de Israel mostró que el 70 por ciento de los ciudadanos quieren destituir al primer ministro y acelerar la celebración de elecciones. Por su parte, el periódico estadounidense Financial Times comentó que Israel sometido a una presión cada vez mayor por parte del Tribunal de La Haya y de la Corte Penal Internacional, necesita ahora más que nunca un liderazgo responsable y sobrio, que el actual jefe de gabinete no puede proporcionar.
oda/yma