Éste, recordó en un comunicado al efecto, ha provocado la pérdida de vidas civiles, la destrucción indiscriminada de bienes, especialmente de infraestructura crítica, y el desplazamiento de la población.

De esa manera, se afirma en el texto, Sudáfrica se solidariza con el pueblo de Sudán, que ha sido sometido a sufrimientos indecibles desde el estallido de las hostilidades el 15 de abril de 2023, siendo los principales protagonistas del conflicto las Fuerzas Armadas Sudanesas (FAS) y las Fuerzas paramilitares de Apoyo Rápido. (RSF).

Sudáfrica reitera entonces su llamamiento para que se ponga fin de inmediato al conflicto armado y “se reanuden conversaciones genuinas y sinceras para poner fin al sufrimiento humano que el pueblo del Sudán ha soportado durante mucho tiempo”.

La presidencia resalta que no puede haber una solución militar a los combates, y que el actual diferendo debe resolverse de manera pacífica sobre la base de un diálogo inclusivo liderado y controlado por los sudaneses, allanando el camino para regresar al proceso de transición hacia una democracia liderada por un gobierno civil.

En el comunicado Pretoria expresa asimismo su profunda preocupación por el estallido de importantes enfrentamientos en El Fasher, la capital de Darfur septentrional, y por la difícil situación que allí enfrentan muchos civiles, especialmente mujeres y niños.

En ese sentido, destaca la reciente advertencia del Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Gutteres, de que “dirigir ataques intencionados contra la población civil e intentar intencionadamente ayuda humanitaria para los civiles necesitados pueden constituir crímenes de guerra”.

En consecuencia, Sudáfrica insta a todas las partes en el conflicto a respetar el derecho internacional, incluido el humanitario, proteger a los civiles, especialmente a las mujeres y los niños, y no obstaculizar de ninguna manera la distribución de asistencia humanitaria ni la prestación de apoyo médico.

Finalmente, Sudáfrica promete su pleno apoyo a los esfuerzos del Enviado Personal del Secretario General de las Naciones Unidas a Sudán, Ramtane Lamamra, la Unión Africana y la Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo (IGAD) para promover el fin pacífico del conflicto a través de la mediación y el diálogo.

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