De acuerdo con la encuesta realizada por el Instituto de Estudios Peruanos (IEP), el 64 por ciento de los que anhelan emigrar reconoce que lo haría solo por un tiempo, mientras que el 31 piensa quedarse fuera para siempre, aunque las historias de los más de tres millones de peruanos que viven en otros países evidencian que muchos se fueron para volver, pero han echado raíces en el exterior.

Para el diario La República, lo que propicia el afán de emigrar es el poco crecimiento económico del país en los últimos años, a lo que se suma el trabajo precario, sin derechos y con sueldos bajos, que caracteriza a la informalidad que representa a 71.9 por ciento de la economía.

En ese panorama, se entiende que la situación económica o laboral es la razón principal por la cual los peruanos anhelan dejar su país en busca de mejores horizontes.

Los países a los que apuntan la mayoría de quienes quieren emigrar son Estados Unidos y España y 68 por ciento refieren que tienen algún familiar en el exterior que podría acogerlos.

Entre los aspirantes a emigrar, la mayoría proceden de zonas urbanas, aunque paralelamente las autoridades han detectado una importante corriente de migración interna, del campo a las ciudades.

Ese desplazamiento, según especialistas, proyecta el riesgo de la despoblación del agro, que abastece de productos alimenticios a las zonas urbanas, y puede incrementar la informalidad y la precariedad laboral.

Visiones empíricas agregan al tema migratorio el hecho de que el país se desangra porque entre quienes emigran muchos son jóvenes profesionales calificados y talentosos que no encuentran condiciones para desarrollarse en su patria.

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