De acuerdo con el organismo, cerca de 76 mil mujeres y hombres prestan servicio en 11 zonas de conflicto en África, Asia, Europa y Medio Oriente como parte de los también denominados cascos azules para la paz.
Sin embargo, la fecha recuerda además el saldo fatal de esa labor, que dejó 61 víctimas mortales solamente en 2023.
Durante 76 años, el personal de mantenimiento de la paz ha trabajado para salvar y transformar vidas en las situaciones políticas y de seguridad más frágiles del mundo.
Más de dos millones de efectivos uniformados y civiles han ayudado a los países a pasar de la guerra a la paz por lo que este año la jornada se centra en sus inestimables contribuciones bajo el lema Preparados para el futuro, unidos construimos un mañana mejor.
La campaña propuesta reconoce el espíritu de progreso y acción colectiva hacia para crear un mundo más igualitario, justo y sostenible con la mayor parte de las celebraciones fijadas para el jueves 30.
El mantenimiento de la paz ha evolucionado para adaptarse al cambiante panorama político y a la naturaleza de los conflictos, que se han vuelto más complejos e interconectados, según la ONU.
Con el apoyo de los países miembros de las Naciones Unidas, este movimiento avanza por el camino marcado en la Nueva Agenda de Paz del secretario general de la ONU, que, ante las amenazas a la seguridad aboga por una respuesta más sólida, holística y colectiva .
Esta fecha reconoce el servicio y sacrificio del personal de mantenimiento de la paz, así como la resiliencia de las comunidades a las que presta ayuda, con especial tributo a los más de cuatro mil cascos azules que ofrendaron su vida en esa labor.
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