En su comunicado, la Asociación ratifica como improcedentes e injustas las disposiciones dadas a conocer por Washington el 28 de mayo último, mediante las cuales pretende ofrecer al sector privado en Cuba una serie de mecanismos financieros y comerciales, que prometen fomentar su crecimiento.
Mientras, apunta, irrespetan al pueblo cubano, al hacer promesas a un sector de capitales privados, «…dejando intactas las sanciones dispuestas por el bloqueo, que tanto daño generan al pueblo de la isla…”.
Considera que la proclamación de tales ajustes de favoritismos deja desprotegidos valores como la vida, la salud y la alimentación de una nación, tratando de dividir y desnaturalizar el sistema económico.
Refiere que, como plantea la Declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores, una vez más, la decisión de la Casa Blanca descansa en su propia visión distorsionada de la realidad cubana, al pretender separar, artificialmente, al sector privado del sector público, cuando ambos forman parte del sistema empresarial cubano y de la sociedad en su conjunto.
“Como cubanos que vivimos de cerca cada paso de la realidad que vive nuestra nación, apoyamos que se conciba la creación y proliferación de las micro, pequeñas y medianas empresas como parte armónica del esquema legal de actores económicos, que pueden ayudar al crecimiento de la economía…».
“No obstante, continúa la Asociación de cubanos residentes, esta forma de gestión particular no puede ser apreciada de forma aislada, dividida, contradiciendo los principios humanistas y sociales que han primado en el sistema político y social cubano”.
Señala que, al mismo tiempo, desde muchos países se elevan voces de rechazo a la lista unilateral de Estados Unidos que califica a Cuba como un Estado patrocinador del terrorismo, aun cuando el mundo entero reconoce que la nación caribeña colabora con todos sus esfuerzos contra ese flagelo.
Para nadie es un secreto las consecuencias que este tipo de manipulación ocasionan al pueblo, cuya situación económica y social se agudiza ante esta calificación, que constituye “un grave acto de injerencia con objetivos políticos y de desestabilización del orden interno en Cuba”, denuncia.
Los cubanos residentes en la tierra del generalísimo Máximo Gómez, refiere la Asociación en su extenso comunicado, nos unimos a las muestras de solidaridad mundial, rechazamos los intentos de división y aseguramos una vez más que Cuba es una sola.
El MINREX señaló esta semana en su Declaración que con el anuncio de Estados Unidos no se eliminan ni modifican las medidas coercitivas que más afectan hoy a la economía nacional y los servicios públicos y que dañan duramente el bienestar de toda la población.
De concretarse las medidas anunciadas, Estados Unidos busca poner en una situación de ventaja al sector privado que se ha establecido legalmente y ha crecido bajo las medidas tomadas en acto soberano por el gobierno de Cuba en consulta con el pueblo, indicó la
Cancillería.
Puntualizó que el Gobierno del país norteño ha sido explícito en su intención de utilizar a este sector con fines políticos contra la Revolución, en función de sus objetivos de cambio de régimen.
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