La rotura de la conductora de alimentación de 78 pulgadas ocurrió el miércoles pasado y afectó los servicios de agua de miles de hogares.
Si bien desde entonces se restableció el agua, los funcionarios dicen que la infraestructura de la urbe no puede satisfacer la demanda y han pedido a todos que contribuyan y reduzcan el uso del preciado líquido.
Incluso solicitaron comprensión a los residentes fuera de Calgary, como en Airdrie, Chestermere y Strathmore, porque esas comunidades también utilizan agua tratada de las dos plantas principales de la ciudad.
Hasta el domingo, el consumo de Calgary se había reducido a 440 millones de litros.
Desde este lunes, continúan las restricciones de uso de agua al aire libre, lo que significa que los propietarios de viviendas y empresas no deben regar sus céspedes, jardines, flores, árboles o arbustos con fuentes de agua municipales.
Todos también deben abstenerse de lavar el exterior de sus hogares y negocios, a menos que sea necesario por razones de salud y seguridad.
Hasta ahora, la ciudad notificó que se han entregado alrededor de 144 advertencias por escrito a los calgarianos sobre el uso inadecuado del agua.
ro/adr





