En 2021 las operaciones con este tipo de vehículos fueron apenas 245, frente a las dos mil 198 registradas en el primer semestre de este año.

De 2021 a 2022 el aumento en las ventas resultó del 315 por ciento, por un total de mil 16 transacciones.

El año pasado fueron compradas mil 841 unidades, y la cifra se superó en el primer semestre de 2024 con dos mil 198.

Detrás de estos números están las inversiones del gobierno en infraestructura, que multiplicaron la red pública y la instalación de 300 cargadores en las rutas nacinales.

Además, se suman 100 puntos de carga rápida que permiten recuperar el 80 pr ciento de la batería en apenas cinco minutos.

Al propio tiempo, el Ejecutivo impulsó beneficios fiscales para la adquisición de vehículos eléctricos, como parte de la segunda transición energética del pais.

El transporte sigue siendo en Uruguay uno de los principales emisores de dióxido de carbono a la atmósfera; el país pretende descarbonizar la economía, y en materia de generación sobresale por el uso de fuentes renovables como la hidroeléctrica, eólica y la fotovoltaica.

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