Los observadores de una variopinta representatividad de casi medio centenar de partidos, organizaciones e individualidades se pronunciaron en un mensaje a la opinión pública nacional e internacional, frente a la “campaña de injerencia e indebida presión externa sobre el proceso electoral venezolano”.

Así como ante los hechos violentos y las manifestaciones de odio desatadas en las redes sociales.

Los firmantes ratificaron el pronunciamiento en apoyo a la “legitimidad, transparencia e integridad del proceso electoral venezolano” organizado por el Consejo Nacional Electoral, que arrojó como resultado la reelección del presidente Nicolás Maduro.

También rechazaron los hechos de violencia provocados tras el desconocimiento del resultado electoral, incluidas las agresiones a los simpatizantes del Gobierno bolivariano en Venezuela y en el exterior.

Así como el asalto y destrucción tanto de las sedes y demás instalaciones de organismos públicos venezolanos, como de los pertenecientes a distintas organizaciones populares, apuntó.

Valoraron asimismo la iniciativa del mandatario reelecto de interponer ante el Tribunal Supremo de Justicia un recurso contencioso electoral que determine firmemente los hechos y dicte sentencia firme sobre el resultado, apelando de esta forma a la vía constitucional, democrática y soberana de resolver la controversia.

Los observadores del Estado español repudiaron el comunicado en el cual llaman a un golpe militar, firmado por la candidatura perdedora y la autoproclamación como presidente electo del firmante de dicho comunicado, el excandidato Edmundo González.

Apreciaron también la convocatoria del Tribunal Supremo de Justicia a los candidatos y al Consejo Nacional Electoral para presentar los elementos probatorios del recurso contencioso electoral.

Entre los firmantes se encuentran diputados nacionales y regionales del Partido Comunista de España; Izquierda Unida (en Sumar); de EH Bildu; de Podemos y del Bloque Nacionalista Galego; dirigentes de fuerzas políticas, académicos y profesores de derecho constitucional e intelectuales.

Junto a periodistas, dirigentes de movimientos sociales, juveniles, de mujeres y movimiento obrero, quienes denunciaron los hechos violentos, las expresiones de odio y la indebida campaña injerencista contra Venezuela, tras el desconocimiento del resultado electoral por parte de la ultraderecha derrotada.

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