Al decir del responsable de Acción Climática, “China nos desafía de una forma tan fundamental que sería ingenuo negar que Europa tiene un problema chino”, según remarcó este lunes en un discurso por la apertura del año académico en la Universidad Tecnológica de Eindhoven, en Países Bajos.
Hoekstra confirmó que la Comisión Europea trabaja en normas más estrictas para garantizar que la financiación a proyectos de hidrógeno beneficie a las empresas del club comunitario.
Las ayudas de China a sus empresas hacen imposible que las firmas europeas compitan en “un terreno de juego equilibrado”, indicó el funcionario, al recordar también la pérdida de competitividad de la UE en la fabricación de paneles solares, vehículos eléctricos y otros reglones tecnológicos.
“Esto está descarrilando nuestra economía y aumentando nuestra dependencia. Eso es inaceptable”, expresó el directivo, quien calificó las medidas proteccionistas como una forma de “restaurar el equilibrio”, sin cortar lazos con la economía de la nación asiática.
Lo hicimos, afirmó, con los biocombustibles y otros sectores, como los aranceles de hasta el 37,6 por ciento a la importación de carros eléctricos chinos “y seguiremos por ese camino”, aseveró.
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