El vocero del Ministerio de Interior, Rachid El Jalfi, dijo que siete de las muertes ocurrieron en la provincia de Tata, dos en Tiznit y dos en Errachidia, donde una de las víctimas es un ciudadano extranjero del que no se dió la nacionalidad.
Las precipitaciones provocaron inundaciones en muchas zonas dónde hacía años que no llovía, y la sequía era una de las principales amenazas, señalan especialiastas del clima este lunes.
Por otra parte, en esta capital, Rabat, 93 tramos de carretera fueron afectados y solo se han podido reabrir la mitad. Unas 40 casas también se derrumbaron en la ciudad.
Medios de prensa locales destacan que estas inundaciones coinciden con el primer año del terremoto que golpeó la región de Al Haouz, a 60 km de Marrakech, al oeste del país. Hubo cerca de tres mil muertos y casi medio millón de personas afectadas. Muchas de ellas viven todavía en tiendas de campaña a la espera de poder reconstruir sus casas, destacan.
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