La Organización Mundial de la Salud (OPS) precisó que de 13 mil 455 a 17 mil 550 recibieron heridas graves en las extremidades, y de tres mil 100 a cuatro mil 50 sufrieron alguna amputación.
La institución advirtió sobre el aumento del número de lesiones cerebrales traumáticas, de médula espinal y quemaduras.
“El enorme aumento en las necesidades de rehabilitación ocurre en paralelo con la destrucción continua del sistema de salud”, denunció el doctor Richard Peeperkorn, representante de la OMS para el territorio palestino ocupado.
Los pacientes no pueden obtener la atención que necesitan, los servicios de rehabilitación aguda se interrumpen severamente y la atención especializada por lesiones complejas no está disponible, lo que pone en riesgo la vida, subrayó.
La institución destacó que en la actualidad solo 17 de los 36 hospitales en el enclave costero permanecen parcialmente funcionales, mientras que la atención primaria de salud y los servicios a nivel comunitario están suspendido o son inaccesibles debido a la inseguridad, los ataques y las órdenes de evacuación israelíes.
El único centro de reconstrucción y rehabilitación de las extremidades de Gaza, ubicado en el complejo médico de Nasser, no funciona tras ser dañado en febrero último, afirmó.
Trágicamente, gran parte de la fuerza laboral de rehabilitación en el territorio ahora está desplazada, agregó.
Al respecto, denunció que al menos 39 fisioterapeutas fueron asesinados desde el inicio del actual ciclo de violencia, en octubre del pasado año.
La OMS recalcó que “la rehabilitación hospitalaria y los servicios protésicos ya no están disponibles mientras el número de personas con lesiones que requieren productos de asistencia excede con creces el equipo disponible”.
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