La veda impone una serie de restricciones a los dirigentes políticos y a los ciudadanos para garantizar que la jornada se desarrolle de la mejor manera.

Desde las O:00 hora de este viernes cesó la propaganda por disposición de la Corte Electoral y como parte del calendario fijado para la publicidad electoral de los partidos políticos, que inició el 27 de septiembre último.

Según dicta la Ley 16.019, queda prohibida “la realización de actos de propaganda proselitista en la vía pública o que se oigan o perciban desde ella, o que se efectúen en locales públicos o abiertos al público y en los medios de difusión escrita, radial o televisiva”.

Tampoco podrán ser difundidos en esos medios y espacios “encuestas o consultas, así como de cualquier tipo de manifestaciones o exhortaciones dirigidas a influir en la decisión del Cuerpo Electoral”, precisa la norma, promulgada en 1989.

Esa legislación es aplicable para elecciones, referéndums y plebiscitos, de manera que la norma rige también para poner fin a las campañas plebiscitarias sobre la reforma a la seguridad social, que promueve la central sindical PIT-CNT y que desde el Gobierno propone habilitar los allanamientos policiales de hogares en horario nocturno.

La ley no prohíbe la entrega de hojas de votación a los ciudadanos, pero reglamenta que solo podrá llevarse adelante a una distancia no menor a los 100 metros de los locales de votación.

La venta de bebidas alcohólicas estará permitida este viernes, pero cesará entre el sábado y el domingo hasta que termine la votación, prevista entre las 08:00 de la mañana y las 19:30 de la tarde.

Los eventos públicos, entre ellos el fútbol profesional, quedan expresamente suspendidos durante la veda.

El ministro de la Corte Electoral, José Garchitorena, dijo que la propia noche del domingo próximo se dará a conocer el escrutinio primario de los votos para la elección presidencial y la de los legisladores. A la vez se conocerán los resultados de los plebiscitos.

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