El país ibérico acogerá el Mundial, después de la cita del orbe en Estados Unidos, México y Canadá de 2026 y antes de Arabia Saudita, elegida para acoger la disputa de la Copa FIFA en 2034.
Los españoles ofrecerán como escenarios los estadios de Anoeta (Donostia-San Sebastián), Camp Nou (Barcelona), Gran Canaria (Las Palmas), La Cartuja (Sevilla), La Rosaleda (Málaga), Metropolitano (Madrid), Nueva Romareda (Zaragoza), RCDE Stadium (Barcelona, Cornellá-El Prat), Riazor (A Coruña), San Mamés (Bilbao) y Santiago Bernabéu (Madrid).
Estarán acompañados por instalaciones en Casablanca, Agadir, Marrakech, Rabat, Tánger y Fez, todas en Marruecos, además de Lisboa y Oporto en Portugal, y tres partidos en Sudamérica, Uruguay, Argentina y Paraguay.
El ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, ex máximo dirigente del Gobierno de Islas Canarias, ponderó precisamente la elección del estadio de Las Palmas de Gran Canaria, entre los escogidos para el máximo torneo del balompié.
‘Ha sido muy emocionante ver a Portugal, Marruecos y España como sedes oficiales de este Mundial 2030, que va a cambiar sin duda la imagen de Canarias y de Gran Canaria con un estadio renovado y con una proyección económica tremenda’, comentó Torres a la radio de esa región.
El actual ministro recordó que la candidatura de Canarias fue complicada ante cierto escepticismo de la FIFA con escenarios fuera de la plataforma continental. Toca ahora luchar por tener el mayor número de partidos posibles, acotó.
Según medios locales, la FIFA pasó por alto cuestiones medioambientales y relacionadas con los derechos humanos a la hora de conceder sedes como el caso de Marruecos, y muy en particular Arabia Saudita.
La federación de Noruega recalcó en un comunicado las razones de su negativa a dar su visto bueno a un proceso defectuoso e incompatible con los principios de responsabilidad, transparencia y objetividad que reivindica la FIFA.
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