En un comunicado divulgado este lunes, el comité que agrupa a los afectados señaló que la compañía atenta nuevamente contra los derechos humanos de los abacaleros, como denominan a quienes trabajan con la planta de abacá.
Empresa Furukawa se BURLA de las y los abacaleros y vuelve a atentar contra sus derechos humanos, SIMULANDO un pedido de disculpas que ordenó la @CorteConstEcu como medida de reparación. ¡No más impunidad! @dsalazaca @Alozpra @marlin99x #FurukawaNuncaMás pic.twitter.com/x9pDV84oIq
— Furukawa Nunca Más (@AbacaleroLibre) January 20, 2025
Cuentan que el 17 de enero, personal de Furukawa se presentó en la hacienda Isabel, provincia de Santo Domingo de los Tsáchilas, y simularon cumplir con el pedido de disculpas que ordenó la Corte Constitucional en noviembre de 2024, pero ni siquiera notificaron a las 342 víctimas.
“Este acto violó los términos de la sentencia y los estándares sobre reparación que han sido emitidos por el Sistema Interamericano de Derechos Humanos”, afirmaron.
De acuerdo con el escrito, el acto se realizó ante “un muy pequeño grupo de trabajadores que no son víctimas del caso”.
La Corte Constitucional de Ecuador determinó que Furukawa no respetó la prohibición de esclavitud y ordenó a la compañía pagar indemnizaciones por valor en conjunto de más de 41 millones de dólares, 120 mil dólares a cada una de las 342 víctimas.
El tribunal determinó que Furukawa mantuvo por más de cinco décadas una práctica análoga a la esclavitud conocida como servidumbre de la gleba, que consistía en aprovecharse de personas en condiciones de extrema vulnerabilidad para que vivan en campamentos dentro de las haciendas.
El fallo judicial también indicó que se verificó un daño general a los abacaleros y al tejido social, así como afectaciones desproporcionadas a mujeres, niños, niñas y adolescentes, adultos mayores y personas que sufrieron mutilaciones al cultivar el abacá.
Para Furukawa la sentencia es de “imposible” cumplimiento.
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