Es vital construir un entorno más favorable para los negocios, que beneficie a todos los empresarios, para que sean más competitivos en costos y ganar en eficiencia en los suministros.

Recordó que históricamente un pequeño de grupo controla la economía de Bahamas, que hace su fortuna a costa de la mayoría.

Davis señaló lo perjudicial que resulta los altos precios, la ineficiencia y la falta de competencia real.

Tenemos que eliminar toda barrera que implique sobrecargar a los consumidores y asfixie a las empresas, algo que atenta contra el progreso, dijo el líder caribeño citado por el diario The Nassau Guardian.

«Estamos implementando fuertes leyes anticompetitivas para garantizar que los precios al consumidor sean más justos», enfatizó el primer ministro de Bahamas.

Davis criticó a los intermediarios que traen los productos importados, una práctica que termina incrementando el costo para los ciudadanos.

Es importante -insistió- conectar a las empresas nacionales directamente con los nuevos mercados, eliminando por completo a los intermediarios.

Hay que cambiar la imagen de que iniciar un negocio en Bahamas a veces resulta frustrante, pues el individuo tiene la idea, la ambición y el impulso, pero el sistema en vez de acelerar el proceso lo hace más lento, indicó el primer ministro.

Debemos crear mecanismos para evitar esas incomodidades, porque el crecimiento económico depende de que las empresas tengan las herramientas necesarias, por lo que ya es hora de racionalizar, simplificar y modernizar la forma en que operamos, no mañana, sino hoy» recalcó Davis.

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