Las fuentes, citadas por el portal Saut Al-Asimeh (Voz de la Capital, en español), informaron que 10 grandes camiones cargados de grava entraron y llegaron a la colina de Tal Ahmar Al-Gharbi, situada cerca de la aldea fronteriza de Kodna, donde también fueron transportadas casas prefabricadas, donde también la maquinaria pesada israelí continúa sus excavaciones.
En un incidente similar, un convoy de vehículos blindados de transporte de soldados de las fuerzas de ocupación israelíes ingresó en la ciudad de Al-Salam, considerada la cabecera provincial.
Otra incursión fue registrada en la ciudad de Khan Arnabeh, lo que se considera el punto más lejano al que llegó el ejército de ocupación desde el inicio de sus incursiones terrestres tras la caída del gobierno de Bashar Al-Assad el día 8 de diciembre pasado.
Los militares sionistas estuvieron en la referida urbe durante aproximadamente una hora antes de que regresaran a su punto de partida en la sede de gobernación y el tribunal en la ciudad de Al-Salam.
Asimismo, una fuerza israelí adicional ingresó al lado oriental de Al-Salam bajo el pretexto de la caída de un dron mientras realizaba misiones de fotografía en la zona.
Por otro lado, circularon en las redes sociales imágenes que muestran obras de demolición y fortificación llevadas a cabo por el ejército israelí dentro de la zona de amortiguación.
La víspera, el delegado sirio ante las Naciones Unidas, Qusay Al-Dahhak, pidió al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que tome medidas urgentes para obligar a Israel a retirarse inmediatamente de los territorios sirios ocupados.
Al-Dahhak subrayó que las incursiones militares israelíes constituyen una violación de la soberanía de Siria y un incumplimiento de las resoluciones internacionales pertinentes, y agregó que esto es inaceptable e injustificable.
A mediados de este mes, el ocupante israelí anunció la confiscación de más de tres mil 300 piezas militares de Siria, incluidos tanques del ejército sirio, misiles antitanque y proyectiles de mortero.
Desde la caída del gobierno de Bashar al-Assad el 8 de diciembre pasado, Israel destruyó casi el 80 por ciento de las capacidades militares del ejército sirio, así como amplió su ocupación del territorio, incluida la zona de amortiguación y el estratégico Monte Hermón.
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