Persiste en Chile inequidad laboral por género, revela sondeo

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Santiago de Chile, 22 ene (Prensa Latina) Las desigualdades entre hombres y mujeres, tanto en materia salarial como en la participación en el trabajo, persisten hoy en Chile, reveló la última edición de la Encuesta Laboral (Encla) divulgada aquí.

Por una parte, señala el documento, se estancó el proceso de contratación de personal femenino, el cual llegó sólo al 38 por ciento del total de asalariados, cifra similar al de las tres versiones anteriores del sondeo.

Además, en comparación con los hombres, las trabajadoras forman la mayor parte de quienes están en los tramos más bajos de las remuneraciones, indica la investigación que recogió datos en cuatro mil 496 empresas con un total de casi cinco millones de empleados.

Por otra parte, persiste la alta segregación laboral horizontal, definida como la concentración de personas de ambos sexos en ciertos sectores u ocupaciones.

La participación femenina se encuentra fundamentalmente en las labores domésticas remuneradas, las tareas de cuidados, la enseñanza, salud y actividades de alojamiento y comidas.

En cuanto a la segregación vertical, o sea la posibilidad de progreso profesional en una empresa, la inequidad se demuestra en lugares donde las mujeres son mayoría respecto a los hombres, pero sólo el 32,4 por ciento ocupan puestos de dirección.

La encuesta Encla es realizada conjuntamente por la Dirección del Trabajo y el Instituto Nacional de Estadísticas con el objetivo de diagnosticar el estado y la evolución de las condiciones de empleo, con respecto a las indicaciones del Código de Trabajo.

En otros aspectos, la muestra reveló que en la mayoría de empresas donde funcionan sindicatos las relaciones laborales se negocian colectivamente y los resultados son vistos de manera favorable, tanto por los patronos como por las organizaciones gremiales.

No obstante, existen dificultades, como la falta de interés de muchos trabajadores en afiliarse y la resistencia de ciertos empleadores que incurren en prácticas antisindicales.

La Encla midió también el impacto del teletrabajo, implementado a raíz de la pandemia de Covid-19, el cual fue calificado como positivo por los entrevistados.

rc/car/eam

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