Durante sus encuentros con autoridades de la nación de los cedros, el ministro de Asuntos Exteriores de Riad insistió en la adhesión del acuerdo de alto al fuego y la aplicación de la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU.

Bin Farhan aseguró al presidente de la República, Joseph Aoun, el continuo apoyo del Reino para avanzar hacia una nueva etapa de prosperidad y crecimiento.

Durante la reunión con el primer ministro designado, Nawaf Salam, el titular saudita destacó que existe una oportunidad excepcional para Líbano que debe aprovechar y expresó su compromiso «de devolver al país a su entorno árabe natural».

Al mismo tiempo, respaldó la intención de Salam de proseguir con las reformas políticas, judiciales, administrativas y financieras necesarias.

También, deseó que los libaneses den prioridad al interés superior sobre los individuales y procedan con las reformas para mejorar la confianza de los ciudadanos.

En el diálogo con el presidente del Parlamento, Nabih Berri, el jefe de la diplomacia de Arabia Saudita discutió la situación en Líbano y la región, la evolución política y las relaciones bilaterales.

Por su parte, Bin Farhan y el jefe de gobierno en funciones, Najib Mikati, resaltaron los lazos fraternales entre ambas naciones, así como la ayuda del Reino en todos los campos en la etapa de recuperación.

En su gira, el canciller convocó a los líderes libaneses a la unidad para trabajar seriamente en el fortalecimiento de la seguridad y la soberanía nacional.

Dos días atrás, durante su intervención en el Foro Económico Mundial en Davos, Bin Farhan calificó como extremadamente positivo el reciente nombramiento de un presidente en Líbano tras más de dos años de vacío de poder.

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