En comentarios sobre sobre el retorno de los habitantes del sur a las aldeas fronterizas tras concluir el plazo de 60 días para la retirada israelí, el mandatario declaró: “juntos seguiremos siendo más fuertes, unidos bajo la bandera de Líbano».
Aoun destacó que la soberanía de Líbano y la unidad de su territorio no son negociables y exhortó a mantener la calma y confiar en las Fuerzas Armadas Libanesas.
El jefe de Estado aseguró el seguimiento de las agresiones israelíes en los más altos niveles para garantizar los derechos y la dignidad de los residentes.
Al considerar el día una victoria para Líbano, el presidente insistió en la unidad nacional y el derecho a defender la soberanía.
“Mientras comparto con ustedes esta gran alegría, les pido moderación y confianza en las fuerzas armadas libanesas, comprometidas con proteger nuestra soberanía, nuestra seguridad y garantizar su regreso seguro a sus hogares y aldeas», añadió.
De acuerdo con el alto al fuego mediado por Estados Unidos y Francia, Israel debía retirar sus fuerzas en un plazo de 60 días, que expiró hoy, mientras el ejército de Líbano y la Unifil refuerzan su presencia en el área, en correspondencia con la Resolución 1701 de la ONU.
Sin embargo, Israel no cumplió con la retirada de sus fuerzas de la tierra ocupada en esta etapa y violó el acuerdo mediante incursiones y detonaciones en las aldeas del sur.
A pesar de las advertencias israelíes, los pobladores del sur comenzaron a regresar y fueron atacados con disparos del ejército de ocupación.
En un balance preliminar, el Ministerio de Salud confirmó 11 muertos y 83 heridos como consecuencia de las agresiones israelíes contra los habitantes del sur libanés.
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