Susana Muhamad, la presidenta de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Biodiversidad (COP16), celebrada en la ciudad colombiana de Cali en octubre pasado, declaró que el objetivo de la propuesta es mantener vivo el espíritu de ese último evento y trasladarlo hacia los que tendrán lugar próximamente en relación al cuidado ambiental.

“Esta caravana nos llevará a los dos años ambientales más importantes en la historia de América Latina. De Cali a Belém tiene cuatro rutas de movilización y participación ciudadana”, aseguró Muhamad.

Para lograr este recorrido, se anunciaron cuatro ejes que trazarán el camino para la implementación del Plan de Acción de Biodiversidad de Colombia, la articulación con el cambio climático en su actualización de las metas climáticas y la preparación para la COP17 de Biodiversidad, cuya sede será Armenia, y la COP30 del Clima.

Las denominadas rutas que constituyen el plan de acción a seguir son la Ruta Institucional de implementación, que velará por los cumplimientos de los acuerdos tomados en Cali; así como la de Biodiversidad y Cambio Climático.

Integran además el plan la defensa de la Coalición Mundial de Paz con la Naturaleza, que impulsa la creación de un movimiento global al que ya se han unido más de 140 mil personas; y la actualización de las metas climáticas de Colombia.

De acuerdo con Muhamad, la Caravana de Cali a Bélem representa un llamamiento para acelerar el financiamiento, fortalecer la participación ciudadana y asegurar que la biodiversidad esté en el centro del debate sobre el desarrollo sostenible.

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